Sugar de Arantxa Comes
El silencio es un arma de doble filo. Si lo usas mucho, sospechan. Si no lo usas nada, sospechan. Para tenerlo a tu favor, debes empezar a probarlo en pequeñas dosis, como el veneno. Al final, parece que tú te acostumbras a él. Pero es al revés: él se acostumbra a ti.
|