Agnes Grey de Anne Brontë
Me preguntaba por qué se daba tanta belleza a las que tan mal la utilizaban, y se les negaba a algunas que la convertirían en un beneficio para sí mismas y los demás. Pero Dios es sabio, concluí. Supongo que hay hombres tan vanidosos, egoístas y crueles como ella, y puede que estas mujeres sirvan para castigarlos
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