La iglesia de Alberto Caliani
Le quitan de profesor para atender a un puñado de beatas convencidas de que sus obligaciones con Dios consisten en pasar el mayor número de horas dentro de la iglesia, preferentemente dándole por culo al cura de turno, para luego poner verdes a sus vecinas y ejercer maldades varias, reforzadas por el poder del Espíritu Santo ¡Si eso no es un castigo, que venga Dios y lo vea!
|