Diario de la guerra del cerdo de Adolfo Bioy Casares
CVII - ... El hombre astuto despliega a tiempo su estrategia contra la vejez. Si piensa en ella se entristece, pierde el ánimo, se le nota, dicen los demás que se entrega de antemano. Si la olvida, le recuerdan que para cada cosa hay un tiempo y lo llaman viejo ridículo. Contra la vejez no hay estrategia. Mirá, en la esquina veo gente, a lo mejor es una patota, o uno de esos piquetes de represión, como los llaman... No cuesta nada dar la vuelta a la manzana y evitarlos. - Uno se resigna a todo. ¿Vos creés que dos viejos señores argentinos, de tiempos de nuestra juventud, se resignarían a esta prudencia? |