Toni J. Puché

Pero la aparente debilidad de aquel ejército se tornó en fuerza, el miedo en coraje y la desolación en esperanza, pues todos ellos luchaban por algo más que su reino o sus hogares. Luchaban por la supervivencia de su raza. De todas las razas.

La vida es un regalo prestado que algún día habrás de devolver.

- Yo... Siento lo de tu familia. Veo el dolor en tus ojos.
+ ¿Dolor? No, niña. Lo que ves es odio, nada más. El odio te hace fuerte. La piedad, débil.

Sé que las dudas no me aportan nada, pero no es tan fácil evitarlas.