Sharon Biggs Waller creció rodeada de artistas y desarrolló su pasión por la historia de la época eduardiana y los artistas prerrafaelitas cuando se trasladó a Inglaterra en 2000. Cuando no estaba trabajando como profesora de hípica en las caballerizas reales del palacio de Buckingham investigaba sobre el movimiento sufragista británico y escribía artículos para revistas. Su cuadro favorito es La sirena, de J.W. Waterhouse. Es jinete de doma y entrenadora, y vive en una granja sostenible de diez hectáreas en el noroeste de Indiana con su marido británico, Mark. Por amor al arte, aclamada por la crítica, es su primera novela.