Neurópata de R. Scott Bakker
-Hasta la ciencia -prosiguió- los humanos no éramos capaces de distinguir las afirmaciones buenas de las afirmaciones malas, más allá de la tradición y el propio interés. De modo que, ¿Por qué no fabular? ¿Inventarse cosas? ¿Por qué no elaborar sistemas de creencias que alimentan nuestra vanidad, nuestra necesidad de tener a todo el mundo en su sitio? No es un accidente que nos hayamos inventado miles de religiones distintas, cada una de ellas distintiva de una cultura.
|