El Misántropo o el atrabiliario enamorado de Molière
¡Se me impulsan mis sospechas y mi dolor hasta el último extremo, se me deja creer todo, se jactan de todo; y sin embargo mi corazón es tan cobarde como para no poder romper la cadena que lo liga, ni armarse de un generoso desprecio contra la ingrata de la que está por demás prendado!
|