Don Juan de Lord Byron
Y seguía resistiéndose a la amarga prueba que Rousseau apunta para la bella que dudaba: "Observa a tu amante cuando abandone tus brazos", pero Juan nunca los dejaba si eran encantadores |
Don Juan de Lord Byron
Y seguía resistiéndose a la amarga prueba que Rousseau apunta para la bella que dudaba: "Observa a tu amante cuando abandone tus brazos", pero Juan nunca los dejaba si eran encantadores |