“Deseaba gritar, abrazarme y besarme desenfrenadamente, pero se negaba a dejarse arrastrar por aquel sentimiento. Había decidido que nunca amaría a nadie. Nunca. Por eso, cuando le besé la planta de los pies aquel día una sensación amarga caló en su corazón.” ~ La edad de oro de Wang Xiaobo. Uf! Quizá no se entienda. Lo aclararé: uf! Uf! Uf! En fin. No sé aún qué quiere contar el autor en este libro… si es que quiere contar algo. O yo no lo he entendido o mi única conclusión es que tiene un problema –no puedo tampoco decir de qué tipo– con su pene. Y, os preguntaréis: “pero, ¿de qué va?” Pues de chico que en el ejército chino conoce a chica y se pasan las poco más de 100 páginas “yo te doy cremita, tú me das cremita, y mira mi cosa como es”. Si tiene trasfondo no lo he encontrado. Lo mejor del libro: que es corto y aún así me ha sobrado el 99 %. |