Anhelo

Grace acaba de perder a sus padres y la única familia que le queda son su tío y su prima que viven en Alaska. Así que se tiene que mudar con ellos y vivir en el Instituto Katmere, del cual es director su tío y en el que los alumnos son un tanto peculiares. Sobre todo Jaxon Vega.

Iba con cero expectativas con este libro porque siempre había leído reseñas regulares/malas. Y me ha sorprendido para muy bien. Está claro que ir sin expectativas es lo mejor para disfrutar bien de un libro.

Es cierto que hay “instalove” y que es uno de los clichés que menos me gusta. Pero en este libro no me ha molestado ni me ha impedido disfrutar de la lectura. Hacia el final del libro la relación se pone un poco más pastelosa, pero aun así no ha llegado ha resultarme cargante.

Grace es un personaje muy odiado, por lo que he podido leer en reseñas, pero a mí no me ha parecido tan odiosa, incluso me ha caído bien. ¿En alguna ocasión he querido darle una h*stia? Evidentemente. Pero creo que bastante tiene con todo lo que ha tenido que pasar y todo lo que se le viene.

Lo que más me ha chocado del libro es que apenas pasan DOS SEMANAS. Y en esas dos semanas pasan demasiadas cosas. Creo que habría sido mejor y más creíble que hubiese alargado un poco más el tiempo.