Si la primera parte es increíble, esta es todavía mejor. La autora ha vuelto a conseguir enamorarme. En esta historia seguimos viendo cómo los protagonistas lidian con sus propios problemas y, sobre todo, cómo hacen frente a los tres grandes temas que se tocan: las redes sociales, el acoso y el racismo. Desde mi punto de vista, creo que están tratados de forma sublime. Mi corazón se ha hecho un poco más grande para dejarles hueco a los dos nuevos integrantes del club, MJ y Souhaib. En serio, leyendo el libro lo único que quería hacer era unirme al grupo y abrazarlos. Todos son maravillosos, pero debo reconocer que sigo sintiendo debilidad por Ryan y Cloe. Por si todo esto fuera poco para que me encantara, encima hay líos amorosos que dan para mucho salseo y «shippeo». Volvemos a encontrarnos ante una historia preciosa llena de música que habla de amistad, sueños y aceptación y que toca temas que están a la orden del día con una sensibilidad extraordinaria. Sé que me reitero, pero es que creo firmemente que estas novelas deberían leerse en todos los colegios. |