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Julia Donaldson y Axel Scheffler, creadores del aclamado “Grúfalo”, se reúnen de nuevo para traer a las bibliotecas de los más pequeños un cuento diferente y divertido que hace homenaje a todas las historias infantiles clásicas. La edición cuenta con unas brillantes ilustraciones, llenas de coloridos y tonos alegres, dibujos claros y definidos que dotan de atractivo a la historia. Cabe destacar que dichas ilustraciones se encuentran repletas de elementos, algo que puede ser muy útil para trabajar con los más pequeños la percepción, atención, memoria, pensamiento y lenguaje, siendo estas habilidades no cognitivas muy necesarias para el desarrollo humano en la etapa infantil. Así mismo, ofrece numerosas oportunidades lúdicas como la búsqueda de objetos, la clasificación, el descubrimiento, la creatividad, entre otras. El texto es sencillo y presenta diferentes fuentes y formatos que ayudan al lector a descubrir las múltiples formas de comunicación escrita; cómic, periódico, revistas, recetas, entre otros. Los cuentos se encuentran separados no solo por el texto sino también por los formatos en que se presentan, creando una delimitación visual entre uno y otro. Cada historia introduce un tipo de cuento diferente, viajamos desde los países más alejados de fantasía, pasando por fábulas, cuentos cómicos, de misterio o aventuras, presentando así a todos los tipos de personajes que podemos encontrar en ellos como animales que hablan, fantasmas, princesas, piratas, caballeros, dragones, etc. Esto consigue transmitir al iniciado lector en las diferentes emociones que se pueden experimentar ante los diversos géneros literarios existentes. Los cuentos que son mencionados van desde los más conocidos como son “Ricitos de Oro” o “La princesita” hasta otros menos conocidos como “La rana Renata” o “El pirata Patapalo”. Cabe destacar que la historia es cíclica por lo que no cuenta con los tres elementos estructurales que caracterizan a los cuentos; presentación, nudo y desenlace. En mi opinión, “El cuento sin fin de Martín” es una historia original y divertida que anima e invita a leer toda clase de cuentos, haciendo descubrir e inclinando al joven lector hacia el género que más puede llamar su atención. Lo recomiendo muchísimo para trabajar con niños que se inician en la lectura ya que ofrece numerosas oportunidades de adentrarse en el mágico mundo de los cuentos. |
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