InicioMis librosAñadir libros
Descubrir
LibrosAutoresLectoresCríticasCitasListasTest
>

Crítica de Oihane


Oihane
15 December 2022
Me ha parecido asombrosa la historia que comienza en las páginas del cómic “Gadiro. El embajador de la Atlántida” y cómo en pocas páginas de este primer tomo titulado “Ataque a Athlán” se nos introduce ya en una trama plagada de elementos que prometen muchísimo y que además tiene como base una de mis mayores debilidades: el relato sobre la mítica Atlántida que Platón nos presenta en sus diálogos “Timeo” y “Critias”. En primer lugar, hay que destacar la imponente estética de la obra, cuyos gráficos corren a cargo de Fabiano Neves. Las ilustraciones son a color y la ambientación general nos traslada a una fantasía con clara raigambre helénica, pero aportando también otros elementos culturales diversos, especialmente egipcios y aztecas. El guion, de la pluma de Manuel Veiga, nos lleva de una manera ligera pero implacable, a conocer a una civilización que dista del reino unido que nos describía Platón.

Atlas y Gadiro son los hijos gemelos de los reyes de Atlantia, el reino más adelantado de los diez que conforman el continente de la Atlántida. A pesar de que Gadiro nació antes, la fortaleza de Atlas le sirvió para ser nombrado heredero y, sin embargo, sigue mirando con suspicacia a su hermano. En este primer volumen, este adelantado reino sufrirá el ataque de Boréas, cuyo ejército se valdrá de la magia del oscuro druida Irandius en la batalla. Gadiro junto con sus compañeros, la princesa azteca Xail, el africano Dhembo, el joven egipcio Naeem y el druida galo Wythrin, tendrá que repeler el sorpresivo ataque del norte para mantener la adelantada forma de vida de la que goza la capital, Athlán.

El autor ha partido de la hipótesis de situar la Atlántida en mitad del océano atlántico, como plataforma entre Europa y Mesoamérica. Esto además le va a proporcionar una gran riqueza al argumento al verse en medio de civilizaciones tan florecientes que parece que serán visitadas en futuros volúmenes. Además, demuestra un gran conocimiento tanto de las descripciones platónicas (aunque la disposición que encontramos en los diálogos en base a círculos concéntricos de tierra solo se replica en el reino de Atlantia), así como de la historia antigua en general puesto que ya nos avanza el nombre de Narmer, primer faraón egipcio a quien se considera unificador de los dos reinos. Me parece muy destacable también el papel que juega en la historia el panteón atlante y cómo nos presenta a unos dioses crueles, pero con una conexión muy fuerte con el devenir humano, tal y como nos traslada la tradición grecorromana. Así, tendremos la historia de estos dioses en un segundo plano y la de los humanos que se ven afectados por ellos.

Los elementos de fantasía y magia que introduce Manuel Veiga encajan perfectamente con toda la ambientación y esa atmósfera tan misteriosa que siempre ha rodeado a la Atlántida. Además, nos ofrece su propia versión de una civilización avanzada para la época con unos personajes femeninos fuertes, presencia del matriarcado, visibilidad LGTBI, etc, aunque siempre tamizado por ese filtro de barbarie presente en un mundo continuamente en guerras internas o con las “tierras exteriores”. Como avanzaba previamente, me ha resultado especialmente interesante la mezcla cultural y, que haya optado por situar la acción en una época (hacia 3150 a.C) tan fértil en este sentido, ayuda especialmente a enriquecer la trama e, incluso, a introducir elementos mágicos en torno a la presencia druídica típicamente celta. Me ha resultado un gran inicio para una historia que promete no dar tregua en torno a personajes muy diversos y especialmente bien esbozados que se mueven magistralmente en esa delgada línea entre la fantasía y la historia que es el continente perdido de la Atlántida.
Comentar  Me gusta         42



Comprar este libro en papel, epub, pdf en

Amazon ESAgapeaCasa del libro
Apreciaron esta crítica ()(4)ver más