Estoy entre impactada y con ganas de escapar del mundo. En este libro se aclaran dudas que pueden haber quedado del anterior (el cual el autor, con mucho énfasis, nos pide que leamos primero) a través de distintas preguntas que le fueron llegando desde que la primera entrega fue publicada. Es imposible no sentir impotencia al ver cómo se maneja realmente el mundo y las instituciones a las que tanta fe les tenía. Si bien el autor intenta "consolarnos", es difícil no sentir desolación al notar el poco impacto y el poco poder de decisión que tenemos. Es un libro muy interesante, con mucha información que se nos esconde en el día a día. Insisto, es elemental haber leído antes el primero. |