Una voz que envuelve. Este libro se abre en canal al lector con un vuelve en la punta de los labios. El amor, el desamor, las decisiones, los desencuentros y puntos de conexión, van tejiendo una memoria que se motiva por la persona que ama, pero ya no está tan cerca como antes; donde hay partes del cuerpo que comprenden más que otras, y las cual duelen de forma dispareja. Creo que todos alguna vez hemos saltado espacios. En este caso, se tile entre versos una despedida que sueña con despertar del recuerdo. El olvido se respalda en traer el pasado y, el presente, en darle tono a las ausencias. La escritura es sencilla, rítmica y está poblado de rimas. En algunos versos me sentí muy identificada y, en otros, no tanto, pero me parecieron muy bonitos. |