Una historia que va entre el misterio y la moralidad, entre el miedo a reconocer las cosas y mantener las apariencias. Una novela que indaga en la mente humana. Esta historia tenía muchos alicientes que me llamaban la atención: crimen y secretos entre un vecindario idílico con unos personajes que auguraban salseo. Pero siento que no ha sido para mí, me ha faltado suspense y no he conseguido empatizar con ningún personaje, y eso que hay un buen reparto. Es más una novela centrada en la protagonista y en su vida, muchos pensamientos de ella y muchas reflexiones sobre lo que ha pasado. Esto no está mal, para nada, pero a mi gusto lector le hubiera gustado que estuviera mezclado con más intriga y acción. Quizá de leer tanta novela de este estilo haya hecho que al pasar la primera parte averigüé “casi” todo lo que iba a ocurrir y eso le restó a la novela. Sin embargo, si te gustan las novelas tipo domestic noire suaves y centradas más en los personajes que en el crimen en sí, se puede disfrutar mucho de ella. |