Me asombran autores como Jerónimo Tristante que son capaces de cambiar de registro, de tema en sus libros , y que siempre tengan un buen resultado. En esta ocasión nos cuenta las aventuras de un caballero, que aunque un poco obligado,ingresa en los templarios para, como espía, averiguar qué hay de cierto en las habladurías sobre sus riquezas o el dominio sobre el Papa. Me ha resultado una lectura interesante,muy entretenida que, sin ser una obra maestra, consigue enganchar. |