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Cogí el libro en la biblioteca porque el protagonista es un bibliotecario y había un asesinato entre medias. Pensé: un bibliotecario resolviendo asesinatos, seguro que es hasta divertido. Pues no. Para nada. Es la cosa más insulsa que he leído en mucho tiempo. Lo primero, que de bibliotecario tiene más bien poco. Lo único que hace es leer libros y poner un sello de censurado a los que no le gustan. Ya está. Eso es todo. Y encima se da aires; la soberbia por las nubes. No le he puesto una estrella porque me ha parecido que la forma en que está narrado es original, pero el contenido deja mucho que desear. Básicamente es un señor criticando a escritores por tonterías bien grandes, mientras de fondo matan a una niña y la tiran a un pozo. ¿Quieres saber quién ha sido el asesino o por qué la matan? Pues este no es tu libro. ¿Que estoy haciendo exactamente lo mismo que hace el protagonista en el libro, es decir, criticar y censurar al autor? Sí, pero yo soy una bibliotecaria de verdad y nunca, repito, nunca daría un libro a comer a las cucarachas, por muy malo que fuera. |
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