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Aparco por un momento las reseñas de libros adultos para hablar de este cuento ilustrado para niños de entre 3 y 6 años que me llegó a través de Masa Crítica de Babelio en una edición dedicada a libros ilustrados, editado por la editorial Libre Albedrío. Está encuadernado en tapa dura con un tamaño ideal para los niños y en él un padre canino va contando a su hijo las profesiones de sus familiares y antepasados a través de los cuadros que cuelgan de las paredes de su pasillo. En cada ilustración hay un cuadro dedicado a una profesión y cada página es a su vez un desplegable que muestra con más detalle el trabajo de cada una de ellas, pudiendo hacer así una lectura más amplia. Las ilustraciones de Miguel Tanco se centran en ofrecer unos colores que no distraigan en exceso de la lectura y para ello elige tres tonalidades suaves en los que destaca un atrayente tono turquesa y todas ellas están realizadas a mano utilizando la técnica de la acuarela y tinta. Una divertida historia escrita por Davide Cali en la que el amor incondicional y el orgullo familiar están presentes y en la que el final depara una sorpresa que sin duda afianza el mensaje a los niños de que pueden ser cualquier cosa que se propongan, seguir los pasos de la familia o emprender un camino diferente, el que ellos elijan. |
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