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Rachel Mitchel es una reconocida actriz que tiene que abandonar Los Ángeles debido a un escándalo. Para que pueda esperar a que se calmen las aguas la envían a Montana, a una casa en mitad de ninguna parte donde vive un familiar de sus representantes. Rob lleva cuatro años de destierro voluntario en Montana ya que tiene sus propios demonio de los que huir, y no está nada contento con su nueva visitante. En la primera parte del libro se desata el escándalo y nuestros protagonistas se conocen mientras saltan chispas entre ellos. En la segunda parte la acción regresa a Los Ángeles donde se desarrolla el resto de la historia. La novela me ha gustado mucho, los personajes son estupendos y me encantaría volver a encontrarme con alguno de los secundarios. Rachel tiene carácter y eso me gusta en las protagonistas femeninas. Rob me ha gustado mucho también. Sophie nos ofrece una historia muy entretenida con malos entendidos, personajes que se dejan llevar por su pasado y familiares y buenos amigos que dan la cara cuando hace falta. Como suele ser habitual con las obras de la autora, me la he leído prácticamente del tirón. La novela necesitaría una buena corrección porque continúa teniendo fallos ortográficos recurrentes, pero aún así estoy deseando leer su próxima publicación. |
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