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A veces, al abrir un libro, sólo por su título nos hacemos una idea de qué nos vamos a encontrar en él. En el caso de Los migrantes, escrito por Marcelo Simonetti e ilustrado por María Girón, podríamos pensar que nos van a hablar sobre qué es ser un migrante, pero la originalidad está aquí presente cogida de la mano de la inocencia infantil, que más nos valdría tomar todos como ejemplo a seguir, ya que así las cosas en este mundo irían mejor. Pauli y su hermano gemelo terminan las clases con la sorpresa de que al día siguiente llegarían dos migrantes. Como no saben lo que significa empiezan a elucubrar e imaginan muchas posibilidades, como que son pasteles, mascotas o juguetes… al final del día acaban tan asustados con sus ideas que no consiguen dormir y cuando vuelven a clase creen que es el fin del mundo. Cogidos de la mano entrarán en el aula muy asustados, menos mal que allí sólo encuentran a 2 alumnos nuevos con los que jugar y pronto se olvidarán de los migrantes que tanto les preocupaban. Os he resumido la historia para que veáis el importante mensaje que nos da el libro: el miedo a lo desconocido nos puede paralizar y hacer que no disfrutemos de la vida. Estos niños prefirieron no preguntar por miedo a causar, precisamente, más miedo. Si no sabes a qué te enfrentas, no vas a poder defenderte en caso de que te ataquen, ni siquiera vas a reconocer el posible peligro. Al final, sólo son dos niños que conocen a otros dos niños que han llegado nuevos al cole y eso sí que da miedo: hacer nuevos amigos, enfrentarse a una nueva vida… Una bonita historia para leerla con ojos de niño y para hacerles llegar el mensaje de que el miedo lo creamos nosotros mismos con nuestra imaginación. Respeto e inocencia, que gran regalo nos da @kalandrakaeditora en otro de sus “libros para soñar”. |
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