Catrijn es una joven campesina quien ha llevado una vida austera y tenido que soportar vejaciones y maltratos por parte de su marido, una vez que este fallece, pronto decide salir del pueblo y buscar un futuro mejor, con esas intenciones llega a la ciudad, su gran pasión por la pintura le abrirá las puertas para poder trabajar en un taller de cerámica pintando y diseñando sus dibujos pero el camino no será fácil y allá a donde vaya un gran secreto la persigue La historia se sitúa en Holanda del siglo XVII, la autora utiliza como hilo conductor a la protagonista para acercarnos a varios momentos históricos, escenas de encuentros con artistas famosos como Rembrandt o Veermer, la peste que asoló gran parte de países bajos y de como surgió la industria de la cerámica tal y como se conoce hoy en día Una novela corta que fluye rápido y se lee en dos sentadas; me ha gustado, me ha aportado conocimiento del país en el que se ambienta y como fueron los primeros pasos para llegar a producir la cerámica holandesa que hoy conocemos, además de algunas curiosidades, anécdotas y obras de sus personajes históricos |