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El asesinato del profesor de matemáticas puede ser un libro bastante entretenido y ofrece a sus lectores más jóvenes un camino más lúdico hacia esa asignatura tan habitualmente odiada: las matemáticas. El libro me recuerda a las tradicionales gincanas o famosas "escape rooms" que tanto se realizan hoy en día, no solo en el aula sino fuera de ella también. Como lectora adulta y enemiga de las mates, el libro no me ha entusiasmado porque en esos tramos en los que los personajes se ponían a solucionar y hablar exclusivamente de los problemas me resultaron algo tediosos. También creo que no es un libro que esté hecho para todos los públicos, ya que algún niño puede encontrarlo más aburrido si verdaderamente no le gusta esta asignatura. Por último, me gustaría añadir que me ha parecido bastante creativa la numeración de los capítulos con esas operaciones. |
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