El ladrón de besos

Una historia muy cortita, adictiva y con un muy buen ritmo. Tengo que decir que a este libro le tenía muchas ganas desde que supe de su publicación en España y que, dejando una escena de lado, en su conjunto me ha entretenido bastante.

El hecho de que sea una novela romántica, con un toque de erótica, basado en mafias y familias importantes y a su vez en la corrupción y en los problemas de las autoridades ante estas bandas, me ha encantado.

Creo que tiene todos los componentes para crear una buena historia, si todo estuviera más ordenado y mejor llevado en ciertos aspectos. Además, he sentido que el final y la resolución de todos los problemas es muy rápida y precipitada.

Los personajes principales es donde flaquea la historia. Siento que Francesca es demasiado niña, impulsiva y que no se hace cargo de sus actos. Wolfe, en muchos aspectos me ha parecido estúpido y un tanto incoherente con sus pensamientos.

Lo que ha hecho que no llegue a simpatizar con sus personajes ha sido una escena que ocurre a mitad de trama que me dejó asqueada. La actitud de los dos protagonistas es un tanto asquerosa y la situación es ilógica. Si esta escena no hubiera estado en el libro, creo que lo hubiera disfrutado muchísimo más.

En conclusión, es una historia que se lee en horas, que te mantiene enganchada y tiene buen ritmo pero que, en muchos aspectos, flaquea.