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En este libro conoceremos a Mia Kobayashi, una periodista americana, con ascendencia japonesa, a la que su exnovio le quita el artículo de su vida. Para resarcirse, es enviada a Japón a investigar una trama de corrupción política. Allí conocerá al Samurái, un despiadado asesino, el cual la ayudará a salir de todo en entramado en el que se ve envuelta. Pero, mientras huyen de la Yakuza, empezará entre ellos una relación que no estaba prevista. ¿Quién es el Samurái? ¿Ángel o villano? ¿Lograrán salir indemnes de esta peligrosa aventura? Porque ellos habían florecido en las sombras; no podían existir en la luz. Con una pluma ágil, fresca y elegante, Carmen nos trae una historia, dividida en dos partes, cada una de ellas narrada por uno de los protagonistas. Una historia con amor, pasión, mafia, suspense, acción y venganza, con muchos secretos y mentiras. La escritora, además ha hecho un impecable trabajo de documentación y ambientación, sumergiéndonos de lleno en la compleja cultura japonesa, con sus costumbres y tradiciones. Mia, una periodista ambiciosa y valiente, se meterá en una trama complicada, en medio de gente muy peligrosa. Por su parte, el Samurái se verá atraído, irremediablemente, por la personalidad arrolladora de esta americana con rasgos japoneses. Un amor intenso y prohibido, que te llegará al corazón. Un final emotivo, que te mantendrá el corazón en un puño, es el broche final de esta bonita historia que, pese a que en ocasiones notaba que el ritmo era demasiado pausado, te dejará con una sonrisa en los labios. Mil gracias, Carmen, por comentarla conmigo. ¡Ya sabes que tengo que leer todos tus libros! Os dejo una de las frases que más me han gustado: “Nunca es demasiado tarde para lo que verdaderamente importa”. |
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