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Estamos ante una novela que además de contarnos una historia de amor, también aborda temas muy reales como la búsqueda de empleo, acceder a un trabajo digno, el abuso de poder o independizarse con un sueldo miserable. Me ha gustado conocer la historia de Martina porque es una chica joven que ha tenido una vida muy dificil y, aún así, se ha buscado la vida ella solita para seguir adelante. Nuestra protagonista no ha conseguido superar la ruptura de su anterior pareja y esto la ha llevado a no creer en el amor, por eso cuando ve indicios de poder encontrar una pareja estable, le asaltan los miedos y las inseguridades y acaba huyendo. Argumentalmente, Me hubiera gustado es un título que plantea problemas cotidianos reales y con personajes con los que fácilmente puedes sentirte identificada. Es un libro cuya protagonista se ve envuelta en un romance a tres bandas que no sabe gestionar por los distintos problemas que van surgiendo. En ese sentido, no he conseguido congeniar con Martina, ya que si tres son multitud, lo de felices los cuatro es totalmente imposible. Al principio me estaba gustando la historia porque Martina es una luchadora y sentía que había llegado el momento de que le pasara algo bueno y avanzara en su vida. Sin embargo, me decepcionó muchísimo por como lleva sus relaciones. No es clara con sus pretendientes y, aún teniendo claro de quién está enamorada, oculta sus sentimientos a los afectados alargando una situación bastante incómoda. Además, entra en un juego peligroso con uno de los pretendientes que me pareció innecesario. Por supuesto, el comportamiento de este tipo es deleznable, pero no entendí que si Martina no quería nada con él, siguiera buscándolo. Los perfiles de los personajes están muy bien definidos. Martina es una chica que carga con una mochila del pasado, es independiente y desde el principio me pareció más mayor de la edad que tiene. Más tarde, da un cambio que no me gustó porque sentí que en vez de evolucionar, da un paso atrás y se vuelve más inmadura y deshonesta. Lucas y Julen son entrañables. Y aunque Diego es un tipo altivo, egocéntrico y manipulador, considero que es esencial en esta historia, ya que ha sido el que aporta los enredos a la trama. En adición, me ha resultado curioso que en este libro hayan pocos secundarios y encima se profundice muy poco en sus vidas personales, pues estaría bien conocer un poco más a Lorena y Carmen. Narrado en primera persona, me ha gustado la pluma de Cristina Santiago porque he llegado a empatizar con sus reflexiones morales y de la vida en general. Pienso que es una escritora con un estilo muy ágil y que ha sabido transmitir una historia con personajes y situaciones muy reales. En definitiva, Me hubiera gustado... es una novela romántica amena y cotidiana que nos muestra cómo nos marcan algunas relaciones para siempre. Un libro ágil y directo para aprender a pasar página y seguir adelante, pese a las vicisitudes de la vida. Enlace: https://laestanteriadecho.bl.. |
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