Mi ángel oscuro

Gracias a Babelio y a Ediciones Arcanas por esta colaboración. Tengo que ser sincera porque la verdad que por la portada no es un libro que hubiese escogido, pero al leer algunas reseñas y compararlo con Crepúsculo, tenía que leerlo, ya me conocéis.

El libro es muy cortito, tiene un poco más de 200 páginas y se lee bastante rápido y creo que podría haber sido una muy buena historia, pero se ha quedado en lo superficial. Me he quedado con ganas de saber mucho más del mundo de los ángeles y demonios y de conocer más a Lionel.

El libro está narrado casi al completo por Sara, nuestra protagonista, aunque hay algunos trocitos contados por Lionel.

Con este libro iba sin ninguna expectativa y aunque algunas cosas me han gustado, no me ha dejado muy buen sabor de boca, la verdad. Me gusta el instalove siempre que esté bien trabajado, pero en este no lo está. Se conocen y desde el primer momento ya se quieren para toda la eternidad.

Una cosa que no me ha gustado es que en un momento dado Sara va a leer un libro y el libro resulta que es otro que ha escrito esta autora, lo cual es una forma de unir los dos mundos, pero me ha parecido más una forma de promocionar el otro libro, no digo que haya sido su intención, pero es lo que me ha parecido.

Los personajes son muy planos y creo que es un libro que hubiese disfrutado mucho si lo hubiese leído en otra época. Tiene el cliché soy un tipo malo que no merezco tu amor, pero a la vez te protegeré y de verdad creo que podría haberse sacado mucho más partido a esta historia y también haber jugado un poco más con la imaginación y no estar tan ceñida a la religión.

Sara me ha parecido muy influenciable. Está en un momento de su vida emocionalmente muy delicado y confía en todo momento en Lionel a pesar de que le esconde cosas. Está hundida por cierta cosa que pasa al principio y de repente llega Lionel y se le acaba la tristeza y se vuelve dependiente a él. Entiendo que se preocupe por él porque a veces no da señales de vida y entiendo que no quiera presionar a Lionel para que le cuente cosas para no alejarlo y dejarle su tiempo, pero hay cosas básicas que debería saber, además de la necesidad que tiene Sara de estar con él en todo momento.

Lionel juega el papel de protector a toda costa y lo de “no te lo puedo contar porque correrías peligro”. A la vista está, que esconder cosas nunca es la solución. Si una persona está en peligro debe saberlo para que ella pueda también estar alerta y tomar sus propias decisiones, no hacerte el salvador. Tampoco me ha gustado que hasta el final no se haya descubierto todo.

En ciertas escenas es verdad que se parece a Crepúsculo, pero cogido con pinzas y porque se parecen por la forma en la que están narradas, pero para nada por las características de los personajes o la trama, aunque puede que Sara sí que se parezca en algo a Bella.

No hay escenas de sexo explícitas, pero sí que te deja clarísimo que las hay y te hace insinuaciones, pero también me parecieron excesivas, parece que ha sido una atracción, más que amor como tal. Porque estas conversaciones y momentos que pasan juntos que hacen que se vaya creando el vínculo las nombra, pero en ningún momento vemos como se va creando esa relación, simplemente no tienen una y de repente parece que llevan tiempo juntos.

El final, aunque tiene un giro que no me esperaba, me dejó un poco a lo “pues vale”. No sé si hay una segunda parte, pero no la voy a leer. Se supone que después de este libro es cuando empieza lo bueno y en teoría una buena guerra entre el bien y el mal que podría haber sido una maravilla, pero se ha quedado en la punta del iceberg.

En resumen, es un libro juvenil entretenido, pero que me ha parecido que no profundiza en los personajes ni en la trama lo suficiente como para seguir leyendo.