Ethin es un mundo dividido en castas. La casta alta vive rodeada de lujo y disfruta de los placeres de la magia. Los semicasta viven contenidos dentro de la muralla, atados a unas leyes asfixiantes, con temor a ser detenidos por incumplir cualquiera de ellas y verse obligados a pagar diezmos de carne y sangre. Nirrim es una semicasta que ayuda a los suyos a escapar. Un día es detenida y así conoce a Sid, casta alta, que le hará replantearse muchas de sus creencias. Sid y Nirrim empezarán a investigar el origen de la magia y el por qué de la casi esclavitud de los semicasta. Mientras tanto, entre aventura y aventura, empezarán a surgir algunos sentimientos... Esta autora lo ha vuelto a hacer. Amé su anterior trilogía y está va por el mismo camino. Esta autora ha creado un mundo increíble, con un sistema de castas intrincado y lleno de secretos. Nirrim y Sid son súper dispares. Nirrim tiene un síndrome de Estocolmo como una casa de grande, nunca ha mirado fuera del muro, fuera de su jaula y es incapaz de ver qué está dentro de una. Sid es pura espontaneidad y será quién le abra los ojos a Nirrim. Una vez abierta la brecha, será imposible de cerrar. Un libro muy original, con una ambientación increíble y un final de infarto de los que te dejan tirándote de los pelos. |