El quebrantahuesos

Quienes me conocéis, sabéis que Blas es uno de mis autores favoritos desde que lo descubrí con “No Mentiras”, primer libro de su “trilogía del No” y en la que me enamoré de su personaje, el inspector Nicolas Valdés.

En este nuevo libro Nicolas, tras lograr acabar con el Mutilador de Mors, en una investigación que le acabó pasando factura tanto a nivel anímico como personal, recibe una llamada de su madre para que regrese a Caedes, el pequeño pueblo de la sierra madrileña en el que nació.
Una joven ha sido asesinada de forma un tanto peculiar, que recuerda aun leyenda de la zona, El quebrantahuesos.

Nicolas no cree en su existencia, y a pesar de que la relación con sus padres es casi inexistente y cuando hablan solo hay reproches, y, que no le va a resultar fácil volver a un lugar del que en su día se marchó, sin mirar atrás, para hacerse policía, decide acercarse junto con su compañero Alfonso, para calmar los ánimos.
Todo se complicará cuando haya una nueva muerte y además el principal sospechoso resulte ser un amigo de la infancia. Aunque el caso no es de su competencia, pertenece a la Guardia Civil, no duda en inmiscuirse. Tiene claro que detrás de estas muertes se esconde alguien de carne y hueso y no un ser mitológico. Así tras convencer a la jueza encargada, se unirá a la investigación.

La narración en tercera persona, con un lenguaje directo, nos vuelve a acercar a Nicolas, a Alfonso y a Irene, una agente de la benemérita que forma parte de la investigación. Además intercalados hay pequeños fragmentos, bastantes escalofriantes, cuyo protagonista es el misterioso "quebrantahuesos" y su mente. Con todo esto, el autor logra atraparte y que quieras seguir avanzado en la lectura para saber más.

En este libro descubrimos la parte más personal de nuestro inspector, mas maduro y comedido. Y aunque a veces su ego prevalece, lo que realmente se esconde detrás, es un inmenso sentimiento de culpa por haberse ido dejando a todos los que le querían sin ninguna explicación. Esta vez no va a poder escapar y tendrá que enfrentarse a su pasado.

de nuevo tengo que volver a hablar de la parte relativa al procedimiento policial en la que Blas es un crack. Para mi ese es sin duda uno de sus puntos fuertes. Se la conoce a la perfección y nos da la información necesaria y precisa para que lo entendamos pero sin pecar de exceso, por lo que no resulta para nada aburrido, sino todo lo contrario.
Y también como siempre cada vez que crees que has descubierto alguna pista de por dónde va, con un giro de los suyos, Blas te desmonta toda la teoría y te deja de nuevo en la casilla de salida.

En definitiva una vuelta de su personaje estrella por la puerta grande. Una historia que se va desarrollando poco a poco, con giros inesperados y un desenlace que, aunque a largo de toda la lectura te va dejando un rastro de miguitas, te acaba sorprendiendo.

Aunque es un libro autoconclusivo, si queréis conocer mejor al Inspector Valdés yo os recomendaría empezar por su trilogía.