Este libro tiene una buena historia, interesante y real. Pero falla en la ejecución. Para mí, el autor no ha sabido encontrar el estilo adecuado. Peca de sentimentalismo vacío, mucha lágrima y mucha emoción que parecen falsas por falta de una buena construcción de los personajes. Y, es que el libro está narrado por sus protagonistas: August y Aphanasie que al mismo tiempo que al lector le cuentan sus vidas a Benjamin Franklin, lo cuentan todo incluyendo como se sentían y describiendo sus emociones hasta el más mínimo detalle impidiendo que el lector descubra, averigüe, sobreentienda y comprenda a los personajes. Tanta descripción sin acción los convierte en planos y poco reales, lo que es una pena teniendo en cuenta que se basa en personas que existieron en el S.XVIII. También, es cierto que se lee muy rápido y que a ratos me recordó a las novelas de aventuras clásicas como El capitán Blood de Rafael Sabatini. Así que, si te gusta este género, es muy posible que disfrutes de este libro. |