Pues todo el libro era una lectura cinco estrellas. Es maravilloso cómo está escrito aunque en la mayoría del libro no ocurra nada reseñable. Pero le he bajado a cuatro por el exceso de topicazos con los que he acabado. Fachas de gomina y bigotillo y malos, malísimos, claro. Rojos de clase muy humilde, con vidas marcadas y físicamente con cicatrices varias debidas a diversas circunstancias y todos todos buenísimos, obviamente. Durante los dos primeros tercios del libro todo eso era muy sutil y por supuesto yo estaba del bando de los buenos y no molestaba en la narración, pero en el último tercio se le fue la mano. Y que conste que sigo diciendo que me ha gustado mucho. |