Fuego y Sangre

Tengo que confesar que este es el primer libro que leo de George R.R. Martin porque, a pesar de habérmelo propuesto innumerables veces cada vez que terminaba una temporada de GOT, siempre, por una cosa o por otra, lo iba posponiendo. Este tochito que tenemos hoy entre manos también me echaba un poco para atrás pero me alegro muchísimo de haberlo leído porque lo he disfrutado enormemente.
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Cuando todos esperaban una continuación de la saga principal va Martin y se desmarca con la historia pormenorizada de la dinastía Targaryen, esos locos de pelo blanco y jinetes de dragones que ya se dejaron caer por Canción de Hielo y Fuego. En este caso nos remontamos a 300 años antes de los hechos que todos conocemos para saber cómo esta familia legendaria llegó a Poniente para unir reinos a base de sangre y fuego, y comenzar así una dinastía digna de cantos y epopeyas. Y así se nos cuenta, como una crónica contada por diferentes voces que han sido testigo de los hechos, y que a veces los han reinterpretado a placer. Padres, hijos, hermanos y hermanas, todos se mezclan para ir contando la historia de una era donde los dragones dominaban los cielos y su poder hacía hincar la rodilla a todos sus súbditos.
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Que no os eche para atrás la extensión de este precioso volúmen, porque vais a disfrutar todas y cada una de sus páginas. Una vez dentro es imposible salir y el nivel de dependencia es grande, se saborea de principio a fin sin darte apenas cuenta (eso sí, no la recomiendo a quienes tienen problema con que haya más de diez personajes en una novela jajaja..) Lo malo, como casi siempre en el caso de Martin, es que es el primero de una bilogía de la que no tengo más noticias y conociéndolo, a saber cuándo la continúa. Lo mejor, que habemus serie este año y no pienso perdérmela. Deseando volver a Poniente.