Yo, que no soy en absoluto de comedias románticas, he disfrutado este libro de principio a fin. Los comienzos siempre son algo lentos, pero es que con la capacidad que tiene este autor de hacerte reír, no puedes parar de leer y de repente estás ya por la mitad y empiezan a pasar cosas y ya sí que quedas enganchada. Los personajes son muy reales, llenos de miedos, inseguridades, luchas internas y un pasado a cuestas, como tú y como yo. Pero siguen adelante con el apoyo de su círculo y luchan por conseguir aquello que se proponen. Durante toda la novela, los personajes van adaptándose a los giros de la vida y aprendiendo las lecciones que los van transformando en las personas que quieren ser. Una comedia romántica donde sí que veo tanto el romance como la comedia. Me he reído muchísimo con Julio y Rocío. He empatizado con Maya. Y he pedido por navidad un Paolo. |