Relato navideño que en un ratito se lee, y sin darte apenas cuenta, porque fluye solo. Es una lectura sencilla que te dejará con una sonrisita tonta al finalizarla. Está repleto de situaciones cotidianas, reales, pero envueltas en bondad, empatía y cariño, todo muy propio del espíritu navideño. Aborda el amor (y no solo de pareja), la familia, la soledad, hay representación lgtbiq+, y todo através de una vecindad que con sus diferentes historias personales se van conectando unos con otros. Los personajes son geniales y de lo más variopinto. Si tuviera que quedarme con alguno sería con Candela, porque es bondad pura, y don Herminio, porque me hizo pensar en cuántos habrá igual que él en el mundo y no tendrán unos vecinos así... Lo he dicho arriba, es inevitable acabarlo sonriendo y con una bonita sensación en el pecho. Sin duda os lo recomiendo. |