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"La atmósfera política de España durante los años de aislamiento internacional era asfixiante. La prensa oficial denigraba a los extranjeros y españoles que pedían un cambio político, tachándolos de agentes del comunismo y la masonería. La brutal represión de los enemigos del régimen era presentada en términos heroicos y moralizantes. Detrás de la pantalla de humo de adulación al ecuánime patriotismo del Caudillo, las espantosas condiciones de vida de la clase trabajadora derrotada coexistían con la buena vida y la corrupción reinante entre la élite de los vencedores. El cinismo se extendió por esa casta franquista a medida que iban borrándose los recuerdos de los sacrificios de la Guerra Civil. Varela, Yagüe, Muñoz Grandes y algunos otros de los generales más austeros, protestaban. Sin embargo, como había indicado la observación que Franco le hizo a Saliquet, la austeridad en los altos niveles era la excepción y contrastaba con la conducta del Caudillo y su familia.Franco se consideraba un ejemplo de austeridad. Y ciertamente no era mujeriego, no fumaba, bebía vino con moderación a la hora de las comidas y no jugaba más allá de apuestas pequeñas en la lotería nacional o cuando jugaba a las cartas con sus amigos (y, más tarde, a las quinielas). Sin embargo, todos los recursos, palacios y cotos del antiguo patrimonio real estaban a disposición exclusiva de su familia, privilegio que él aprovechaba plenamente, en especial para cazar. Los gastos de sus partidas de caza y pesca eran enormes. La pesca en alta mar requería el mantenimiento del yate Azor durante todo el año y una escolta naval cuando perseguía atunes y ballenas por el Atlántico. Tanto la caza como la pesca de río implicaban el traslado de enormes séquitos por toda España. Además, junto con los costes ocultos del descuido de los asuntos gubernamentales, puesto que no sólo iba de caza Franco, sino varios de sus ministros, estaba el esfuerzo para asegurar que la excursión del Caudillo fuera fructífera, lo cual significaba repoblar amplias zonas marinas durante períodos prolongados y alimentar ciervos y otras especies de caza en puntos estratégicos de los cotos".No hay más preguntas, señoría. Bueno sí, una:En serio soy la única persona de Goodreads que ha tenido los bemoles de leer la biografía de Franco de Paul Preston en castellano? Y una reflexión final:El franquismo sociológico existe, y está entre nosotros.
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