Un libro con una historia increíble e impactante. Saber que la autora se tomó el tiempo de investigar y traer una historia sobre racismo lo más cercana a la realidad es una genialidad. La historia es cruda y real. Lo mejor, ademas de la pluma adictiva y fluida de la autora, son los puntos de vista de los narradores. Tenemos el punto de cita de Ruth, mujer afroamericana, la víctima. Tuck, un supremacista, un personaje lleno de odio que no ve más allá de sus narices. Y Kennedy, la abogada. El mejor personaje diría yo. No hay nada negativo en este libro. Es una historia cruda, real, informática e impactante que debe ser leído por muchísimas personas. |