Sandra Ptrignani nos introduce en la intimidad de algunas escritoras (pocas cosas más íntimas que una casa) para hacer una pequeña biografía de estas autoras, algunas desconocidas para el gran público. La autora no da ningún tipo de razón por la cuál ha elegido estas autoras para mostrarnos sus casas, quizá haya otra parte o simplemente las ha elegido porque le gustaban o ha querido hacerlo así. El entrar en las casas se convierte en una excusa para contar la vida de las escritoras de una manera simple sin el lenguaje que se suelen utilizar en este tipo de narrativa. El “problema” que he tenido yo con este libro es que pensaba que las casas iban a tener más protagonismo, no puedo explicar lo que me imaginaba pero quizá sí conocer a las autoras en sus ámbitos domésticos cuando no estaban escribiendo. Por lo demás se trata de un libro muy interesante y muy recomendable. |