Hilda Historias del páramo

Un cómic tierno, divertido y ameno que agradezco a Babelio español y al sello Barbara Fiore Editora que me hayan mandado en una de las últimas ediciones del programa Masa Critica.

Hilda es una niña curiosa y vivaz que vive en una bonita casa en medio de un valle junto a su madre. A su alrededor hay un mundo poblado de bosques habitados por hombres de madera, cielos en los que vuelan las Lobondrinas, rocas que en realidad son trols y diminutas ciudades habitadas por duendecillos invisibles. Un mundo que Hilda descubrirá a lo largo de sus mil y una aventuras.

Me sonaba de haber visto en alguna librería los cómics de Hilda, pero no sabía nada de ellos. Sin embargo, en cuanto le hizo sinopsis, no dude en pedirlo en una de las últimas ediciones de Masa Critica, convencida de que iba a disfrutar su lectura. Y así ha sido. En este volumen nos encontramos con las dos primeras historias de la serie. En la primera, “Hilda y el Troll”, la protagonista se topara con una roca sospechosa durante sus aventuras. Esta historia es bastante sencilla, sirve más bien para introducir al lector en el entrañable mundo en el que Hilda se mueve, donde el folklore nórdico cobra vida. Y también nos ayuda a conocer más a Hilda, una niña cabezota, ingeniosa, inquieta e inconformista, cuyo carácter es muy vivaz y energético. La segunda historia que encontramos en el tomo “Hilda y el gigante de medianoche”, es un poco más complicada, sin ser excesivamente difícil. Aquí, Hilda y su madre tendrá que hacer frente a unos seres que no pueden ver, los cuales estaba obcecados en que tienen que dejar su casa y no paran de complicarles la existencia. Y todo esto, mientras la niña ve de noche una figura más alta que las montañas que, obviamente, no deja de intrigarla.

La aventura, la magia y el folklore pululan a sus anchas en estas historias con fuerte sabor a cuento de hadas. Es una historia tierna que está más enfocada al público infantil. Pero no por ello dejará de gustar más a los lectores más mayores. Las aventuras de Hilda son de los más entrañables, y permiten descubrir la mitología nórdica de una forma dinámica y cercana. Pearson logra el equilibrio perfecto entre folklore e imaginación al introducir criaturas de cuño propio, como las Lobondrinas (seres esponjosos sobre los que Hilda puede viajar y que surcan constantemente los cielos del valle donde vive) o Granizo, el adorable ciervo-zorro que acompaña a la niña en sus viajes. Y además, le da su propio toque a criaturas como los troles y los gigantes. Pero todo esto no quiere decir que el autor no meta pinceladas más ácidas, con comentarios más críticos sobre la vida y la sociedad. Esto le da una historia más enfocad al público infantil, un aire realista que le va muy bien y le da más matices a todo en general. Hilda es una protagonista realmente encantadora y pizpireta a la que le encanta explorar y tiene suficiente astucia para salir airosa ella solita de los mil y un líos en los que se mete, digna heredera de heroínas como Pipi Calzaslargas o la Alicia de Lewis Carrol. Es un carácter con el que los niños se pueden sentir muy identificados, y que se las ingenia para llegar muy bien a ese público.

Y como no podía ser de otra manera, todo esto nos lo trae de la mano Bárbara Fiori Editora en un tomo que simplemente precioso. Como ya mencionado más arriba, el volumen incluye las dos primeras historias de la serie, a las que acompañan una serie de detalles como bocetos, comentarios sobre la mitología nórdica y datos sobre el dibujo y la creación de los cómic. Es una edición muy cuidada, llena de detalles y realmente bonita, en la cual puede lucirse el estilo personal que el autor, Luke Pearson, sabe imprimirle a su trabajo. Su dibujo es bastante personal, aparentemente sencillo, pero con mucha más enjundia de lo que se ve a primera vista, lleno de imágenes visualmente preciosas. Está lleno de detalles que hacen una delicia verlo y leerlo. Y también de mucho colorido, algo que en esta ocasión he disfrutado especialmente, porque personalmente me gusta mucho la combinación de colores que se utilizan tanto para la edición y el cómic como para los dibujos interiores.

En definitiva, un cómic más que recomendable. Se lee muy rápido y se disfruta aún más. No me importa mi vida, seguir leyendo más sobre las aventuras de Hilda y las curiosas criaturas que va conociendo en su día día.