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Arcadia ha sido una novela que me ha provocado sentimientos encontrados. La he disfrutado por momentos porque, inicialmente, me ha costado mucho adaptarme al mundo creado por Iain Pears, ya que nos encontramos con diferentes tramas, ubicadas en distintos períodos temporales. He tenido cierta lucha interna al intentar adelantarme al autor, a descubrir su propósito en todo el rompecabezas que ha ideado y, nop. Desde ya os digo que no lo intentéis porque os volveréis locos. Lo mejor es dejar que la historia fluya y que descubráis las conexiones cuando autor y personajes estén preparados y desvelen por sí solos las claves de ese intrincando mundo donde se mezcla la ciencia ficción, la fantasía, el thriller e incluso el mundo distópico. Pero esa sensación también fue menguando bien entrada la trama, cuando los diferentes escenarios van encajando uno tras otro y desvelando su razón de ser, dando como resultado un desenlace asombroso que provoca que ese desconcierto inicial haya bien merecido la pena y el lector deje de tener ese sinsentido y desconcierto que le acompañó en la primera parte de la historia. La verdad es que resulta difícil explicaros por encima las líneas generales del argumento, ya que la sinopsis sólo revela una mínima parte, Anterworld: un mundo de fantasía creado por la imaginación del profesor Henry Lytten para el desarrollo de su novela. Lo que no sabe el profesor es que ese mundo es más real de lo que se imagina y que el acceso a él se encuentra en un portal ubicado en su propio sótano; un portal con el que Rosie, un adorable niña de quince años, entra en contacto sin querer mientras trata de hallar a Jenkings, el gato del señor Lytter. Así, nos encontramos automáticamente con dos tramas iniciales: la primera, que ocurre durante los años 60 y que persigue la vida del profesor Lytten elaborando el mundo de fantasía para su novela, y su conversaciones con Angela Meerson, una mujer procedente del futuro y que resulta ser la mismísima creadora del portal al otro mundo. Y la segunda, con Anterworld como escenario: una población analfabeta y con tintes medievales, donde los jóvenes con dotes para la lectura son llevados a Ossenfud y son formados en el arte de la narración. En Anterworld conocemos a varios personajes como lady Catherine, Pamarchon, el estudioso Henary y su aprendiz Jay, Jaqui... así cómo las costumbres e ideologías, muy peculiares y extrañas, y de cómo la llegada de Rosie a través del portal cambia el rumbo de la historia, provocando un antes y un después en todo Anterworld. Y si estas dos tramas no fueran suficientes, Iain Pears desarrolla dos líneas temporales más ubicadas en dos futuros diferentes e indeterminados. En el futuro uno, conocemos más en profundidad a Angela Meerson y su trabajo en la elaboración del portal hacia otros mundos bajo las órdenes de Hanslip. Junto a su compañero Alex Chang, Angela estudia las implicaciones de las variantes del pasado en el futuro, viéndose en la necesidad de viajar ella misma al pasado para evitar que su investigación actual caiga en las manos equivocadas y que las consecuencias para la humanidad sean desastrosas. En el futuro dos, conocemos a Oldmanter, el antagonista, un hombre que sólo piensa en el poder y en colonizar otros mundos; y a Lucien Grange, alguien que va adquiriendo importancia conforme avanza la historia. Como veis, una trama que mezcla pasado, presente y futuro y, al mismo tiempo, un sinfín de géneros literarios. Es un libro bastante extenso, dividido en 66 capítulos narrados desde el punto de vista de los diferentes personajes principales de cada línea temporal. Este aspecto puede parecer un poco tedioso porque son muchos los personaje que entran en contacto con los protagonistas a lo largo de la historia, y más aún cuando esas tramas se van enlazando y desvelando la conexión existente entre todas ellas, pero, en cambio, resulta sencillo identificar a los diferentes narradores y es algo que sí que me ha gustado de la pluma del autor: que pese a no hacer referencias iniciales sobre el escenario y la voz cantante de cada capítulo, sólo con las primeras líneas ya te encuentran ubicado y metido en situación, ya sea en Anterworld con Rosie y sus habitantes, en el presente con el profesor Lytten, en el futuro uno con el trabajo de Angela Meerson o en el futuro dos con Oldmanter tratando de conseguir su objetivo. Además, conforme los personajes van tomando decisiones se modifican los diferentes escenarios por los que se mueven, cambiando hechos y situaciones, y el lector se va haciendo eco de las consecuencias de esos cambios en los años 60, en los dos futuros y, principalmente, en Anterworld que, por razones desconocidas para el lector hasta el final, sufre el mayor de los cambios. La gran pregunta que nos introduce Arcadia es: ¿Qué es Anterworld y qué representa para la vida real? La pluma y la imaginación del autor es sorprendente y alabo la habilidad de crear una historia tan intrincada como ha resultado ser Arcadia. No es una novela que destaque por la acción, sino más bien por las numerosas situaciones en las que se meten los protagonistas y que dejan al lector con un cúmulo de emociones a caballo entre el desconcierto, por no estar entendiendo absolutamente nada, y la sorpresa, una vez que las piezas empiezan a encajar con maestría y producto de un rompecabezas bien elaborado. Si estás buscando una novela multigénero con un argumento que fluya rápido y que sea fácil de imaginar y entender, no te recomiendo este libro. En cambio, si lo que buscar es una novela multigénero con la habilidad de presionar, de llevar al lector más allá, de desconcertar y, al mismo tiempo, dejar con la boca abierta, entonces sí, te animo a que descubras Arcadia y te dejes llevar por ese desconcierto y sinsentido que desemboca en un desenlace fantásitico. En resumen, 'Arcadia' ha resultado ser una lectura difícil y extraña pero también una obra bien elaborada. Con un intrincado argumento con viajes en el tiempo y escenarios propios de la fantasía épica, Iain Pears desarrolla una novela multigénero que hace trabajar la mente del lector a cada paso, presentándole escenarios en principio sin relación alguna para terminar con una desenlace donde todo encaja a la perfección. He tenido mis más y mis menos con la primera parte del libro pero, en general, y sobre todo por el desenlace, es una obra que debes leer si te gusta poner tu mente a trabajar durante la lectura y descubrir un resultado sorprendente. Enlace: https://eraseunlibro.blogspo.. |
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