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La verdad es que echarse para atrás al ver su número de páginas sería un error porque en ningún momento la historia se hace larga. Es el comienzo de una trilogía muy dulce y dura, dulce porque Tatiana (protagonista) es una mujer buena, pura e inocente. Su amor por Alexander nos va a emocionar y toda la narración sobre la guerra (pues él es soldado) y cómo consiguen sobrevivir entre tanta muerte y miseria en un país desolado por el hambre ... Será también un libro de relectura
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