Una bonita historia de segundas oportunidades con una subtrama de intriga que he disfrutado mucho. Alice con su determinación y fuerza me ha conquistado, mientras que con Tyler (bombero borde al que conocí en 'Nunca serás agua') he tenido mis más y mis menos, pues en alguna que otra ocasión me ha puesto bastante nerviosa con su comportamiento. Reencontrarme con la familia Gallagher, sobre todo con Megan y Margot (fan total de esta mujer), me ha encantado. Asimismo, la ágil y fresca pluma de la autora ha hecho que devorara la novela. Ahora espero con muchas ganas la historia de Austin.
|