Sol de invierno

Hacía muchos años que no leía nada de Diana Palmer, por lo que cuando descubrí este libro en seguida me llamó la atención. La sinopsis prometía una historia bastante interesante y que me apetecía leer, así que no dudé al añadirla a mi wishlist porque, en general, las historias de esta autora me suelen gustar mucho. Puede que me echara para atrás en un primer momento el que formara parte de una saga, pero, tras comprobar que los protagonistas de uno y otro libro no tienen ninguna relación entre sí, son historias completamente autoconclusivas, no me lo pensé dos veces. Sin embargo, para mi sorpresa, me encontré con una historia completamente diferente a la que esperaba, lo que ocasionó que me llevara una decepción bastante grande.

Los que me seguís desde hace tiempo os habréis dado cuenta de que siempre intento hacer un pequeño resumen para complementar la propia sinopsis del libro que estoy reseñando, pero, sinceramente, esta vez no sé ni por dónde empezar, porque la sinopsis oficial ha sido la razón por la que este libro ha sido una completa decepción. El caso es que he terminado leyendo una historia muy distinta a la que promete la sinopsis. ¿Por qué? Porque lo que se nos narra en ella es la recta final de la trama. Sí, lo que leéis. La narración realmente empieza cuando J. C. y Colie deciden empezar a salir hasta que esta se queda embarazada y se desencadena todo lo demás. Realmente no hay mucho que contar, porque no hay ni suspense ni giros que consigan que el lector siga leyendo. Ni siquiera el interrogante de quién es el padre de la hija de Colie. Todo se resuelve de forma muy fácil y rápida, ya que parece que todo está predispuesto para que sea de esa manera. No se generan los conflictos que se espera que se generen y eso me ha dejado bastante descolocada. La única razón por la que no terminé abandonando la lectura era saber cuándo pasaba lo que nos adelantaba la sinopsis, pero ya os digo que es la recta final y que después de eso no hay nada más.

Sin embargo, no todo acaba ahí. ¿Alguna vez habéis confundido el tiempo en el que se sitúa una novela? ¿No? Pues a mi me pasó con este libro. Cuando empecé a leer pensé que estaba leyendo una historia ambientada en el siglo XIX. La familia de Colie es extremadamente religiosa –Jared, su padre, es reverendo– y el resto del pueblo con el que se relaciona parece que también lo es, porque nadie cuestiona a Colie en ningún momento, sino que todo el mundo le da razón. No fue hasta unos capítulos más tarde cuando se me cayó la venda de los ojos –o más bien me la arrancaron– al nombrar la película Moana o la serie Sherlock. Porque sí, hay televisión pero casi nadie la ve y hay internet pero casi nadie lo utiliza. Si no hubiera sido porque se nombran coches deportivos y jet privados, probablemente hubiera seguido felizmente pensando que no se ambientaba en este siglo.

En cuanto a los personajes, no puedo decir mucho de ellos, porque prácticamente no se profundiza mucho ni tienen una gran evolución. Colie es una chica muy religiosa como ya os he comentado, por lo que tiene una actutid chapada a la antigua, muy inocente y, en ocasiones, también muy infantil. J. C. es todo lo contrario a Colie, es muy liberal y no quiere atarse a nadie, por lo que está totalmente en concreta del matrimonio y de tener hijos. Como veis, estamos ante dos polos opuestos. No obstante, no me ha terminado de convencer cómo se ha desarrollado esta relación, porque todo entre ellos son malentendidos y hay una claro problema de falta de comunicación. También conocemos a otros personajes alrededor de Colie, como Rodney –su hermano–, Ludie –su hija– y Jared –su padre–. de estos personajes secundarios poco tengo que decir, pero destacaría sin duda a Jared ya que, a pesar de esa religiosidad extrema que puede presentar, es capaz de poner a su hija por encima de sus creencias. Lo que sí que no ha cambiado con respecto a otros libros de la autora, es su narración. La pluma de Diana Palmer es bastante ágil y sencilla, sin muchas florituras, y eso se ve reflejado en mi ritmo de lectura, ya que, a pesar de que no he disfrutado especialmente de Sol de invierno, ha sido una lectura que he terminado casi en un abrir y cerrar de ojos.

En definitiva, Sol de invierno de Diana Palmer es una novela que me ha decepcionado considerablemente, no por la historia en sí, que puede ser muy disfrutable, sino por la idea equivocada que tenía sobre ella. Puede que si me hubiera informado más antes de tirarme a la piscina, no se hubiera convertido en una decepción tan grande. Por ello, si os llama la atención, no dudéis en animaros a darle una oportunidad.
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