La forma de narrar (y cambiar de narrador) de Onetti me ha gustado. Pero se me ha hecho difícil eso de no explicar nada del pasado, de dar muchas cosas por supuestas (¿a elección del lector?) y de tanto monólogo existencial de Larsen. Sé que así es el existencialismo, pero en ocasiones se hacía pesado. Tendré que probar con otras novelas del autor
|