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Cuenta la historia familiar de los "Gibola",una familia del norte de España que vive en su caserío a principios del siglo XX. Es una historia bonita, dura y triste, pero con cada nuevo acontecimiento quieres saber qué les pasará y no puedes dejarlo. Me ha resultado entretenido, es una historia que engancha prácticamente desde el principio y, aunque son sólo 185 páginas, no queda corta. Gracias a las descripciones, muchas y buenas, te traslada a la época y el lugar, aunque, en algunos casos, esas descripciones caen en momentos muy inoportunos, me explico: momento álgido de la historia, dramático y decisivo,estás en vilo por la situación,uno de los personajes (no voy a desvelar nada) sale en busca del médico yyyyy...justo en ese momento la autora decide explicar cómo es el médico, con quién vive, su pasado, sus amoríos...., y no explica si le gustan las natillas de milagro, con lo que rompe el momento de tensión y quita el foco de lo que estaba pasando realmente importante en la historia; lo peor es que ocurre más de una vez, las descripciones son buenas, pero mal ubicadas a mi parecer. Por lo demás creo que lo recomendaría. |
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