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Olav es un asesino a sueldo. Mata porque es lo que mejor sabe hacer. Trabaja para uno de los dos grandes capos de la droga de Oslo, Daniel Hoffmann y, como en lo suyo es bueno, su vida transcurre plácidamente dadas las circunstancias. Hasta que Hoffmann le encarga una misión: matar a su mujer, Corina Hoffmann. Y ahí empiezan sus problemas porque, mientras espía a la mujer para averiguar la forma de matarla, se siente atraído por ella y empieza a plantearse cosas. En esta ocasión, Nesbo nos muestra la otra cara del espejo. Si en la serie protagonizada por el detective Harry Hole nos enseñaba a quiénes luchaban contra el crimen, en esta ocasión el protagonista es lo contrario: un criminal. Y de la peor especie: el que mata por dinero. En un determinado momento, podemos llegar a entender a ciertos criminales: no sería la primera vez que, leyendo una novela, te pongas “casi” del lado del asesino. Pero eso es imposible cuando el asesino es un sicario, un asesino a sueldo, alguien que mata por dinero. Por pasión…, puede llegar a justificarse pero por dinero…, imposible. Y ese es Olav, el protagonista, un sicario, un asesino a sueldo. Alguien que ha matado a mucha gente contra la que no tenía nada, a la que ni siquiera conocía. Por el mero hecho de que alguien le ha pagado por hacerlo. Y, a pesar de ello, a pesar de que es un antihéroe total, acaba cayendo bien. Quizás porque además de protagonista es narrador. O porque se nos muestra tal y cómo es, sin tratar de justificarse. O por las pequeñas perlas que va soltando. O quizás porque, en el fondo, parece que quiere redimirse y acaba mostrándonos su mejor cara. No sé muy bien por qué pero lo cierto es que es un personaje-protagonista-narrador que me ha acabado cayendo hasta bien. Es, como digo, él mismo quien nos cuenta sus cosas. Así sabremos algo de su pasado, por qué se hizo sicario, cómo vive, para quién trabaja y ciertas cosas que ha hecho que demuestran que tiene su corazoncito. Se nos presenta cómo alguien no demasiado hábil, ni inteligente. de hecho, él se considera más bien un cero a la izquierda. Bueno para nada, salvo para matar. Aunque, planificar un asesinato, ejecutarlo y no ser capturado y así durante años, está claro que denota un cierto nivel de inteligencia y preparación, ¿no? “Sangre en la nieve” es un libro cortito, para leer prácticamente de tirón. Con un estilo ágil, dirigido directamente al lector y un asesino cautivador, reconozco que me ha gustado. No tanto como las novelas que he leído de la serie de Harry Hole, pero me ha gustado. Conclusión final “Sangre en la nieve” es un libro un tanto diferente a los que suele escribir Jo Nesbo. Un libro protagonizado por un sicario, un antihéroe. Un hombre que hace lo que mejor se le da en la vida: matar. Y que medita sobre lo que es y lo que hace. Entre estas meditaciones, realizadas con un estilo irónico y socarrón, hay auténticas perlas. Enlace: https://librosquehayqueleer-.. |
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