A través de la Arena

Con A través de la arena (2017), Laura inicia una trilogía de fantasía juvenil en un mundo completamente nuevo con unos personajes muy llamativos.
La historia se sitúa, en un primer momento, en el reino de Vassla, donde reside el príncipe de este mismo reino: Dins, quien, en realidad, se ceba a leer en sus ratos libres, puesto que lo único que quiere es salir del castillo y de su reino y ver mundo, saber qué se esconde tras los muros de su desértico reino. Esta idea me recordó a Enredados o a Rapunzel, el hecho de sentirse enjaulado (sin estarlo exactamente), en el reino del que quiere escapar.
Otro aspecto curioso de la vida de Dins es que su padre le obliga a casarse con otra princesa, algo que me llamó la atención porque creo que, como lectores, estamos más acostumbrados a vivir la situación a la inversa y me ha gustado este trueque en el cliché.
Pero, a pesar de ser un ávido lector y de estar ansioso por conocer la historia de su reino y su país, Dins es bastante más ingenuo de lo que parece. Es un cortesano con tintes de intelectual al que se le da bastante mal cuidar de sí mismo y es muy dependiente al comienzo de sus aventuras con Nuage, nuestra otra protagonista. Afortunadamente, a lo largo del libro asistimos a la evolución de Dins, tanto en cuanto a su forma física como psíquica. de hecho, creo que ha sido el personaje que más evoluciona y, por el momento, diría que es mi favorito.
Como digo, Nuage es otra de los protagonistas de esta novela. A diferencia de Dins, ella es una chica huérfana que roba para sobrevivir, motivada por el hambre, las deudas y los impuestos, una persona independiente que sabe luchar y que siempre viaja armada.
Así pues, tenemos un contraste muy grande entre ambos protagonistas, en un reino que se acerca bastante a una monarquía déspota y cuya época podría asemejarse a nuestro siglo XVI. Y, en cuanto a esto, es una fantasía muy peculiar, porque la mayoría de las historias de fantasía se suelen ambientar en la Edad Media, pero A través de la arena se aleja bastante de esa idea. Tan solo es la historia de un mundo que no es el nuestro en una época un tanto oscura y llena de secretos para nuestros personajes.
Entonces, ¿cómo dos mundos completamente diferentes se unen en la novela? Ambos tienen el mismo interés: marcharse del reino en busca de algo mejor, pero nadie parece conocer qué hay detrás del muro o más allá de la arena, si es que de verdad hay algo. Debido a algunos infortunios que se suceden la noche de la boda de Dins, ambos se topan por casualidad y se prometen marchar juntos.
Sin duda, son personajes bien construidos, pero cuando de verdad cobran vida es cuando actúan en correspondencia del otro y conocemos exactamente cómo es la vida de una persona de la baja sociedad junto a alguien que nunca ha tenido que cuidarse solo, como es el caso de Dins.
Las aventuras que les siguen durante la historia son numerosas, y aquí quiero destacar el papel de los personajes secundarios, que, quizá no tan importantes al principio, terminan siendo claves para el final, como es el caso de Kurinth (otro de mis favoritos) y al primer grupo con el que se topan en su viaje. No obstante, también había personajes secundarios del ambiente palaciego que me hubiera gustado conocer más, como son Kana, la mujer de Harad, uno de los guardias con quien más confianza tiene Dins y cuya mujer le entrega los libros que él lee. Son personajes que, llegado un punto del libro, parecen convertirse en una suerte de villanos, pero que confío en que esconden también sus secretos y espero que sus cicatrices cobren sentido en los próximos libros (me entenderéis, si lo habéis leído).
En cuanto al worldbuilding que ha creado la autora, el libro viene acompañado de un mapa y eso es un punto a favor siempre. La historia que se esconde bajo la arena es magistral. La autora ha creado nuevos nombres de figuras históricas importantes y guerras, entre otros aspectos, que me han maravillado y me han parecido muy acertadas en la construcción de este mundo. Si bien es verdad que es una información que se nos va dando muy poco a poco, cuando llegamos al final comprendemos que no podía haber sido antes el momento de averiguar por qué todo lo que les rodea tiene arena. Además, la historia de lo que pasó antaño se relaciona con unas criaturas más propias del folclore y los cuentos infantiles, como son los gigantes, algo que me ha gustado mucho por su originalidad. Es decir, no es una novela de fantasía con dragones, magia por doquier, o unicornios alados, sino algo mucho más sutil, pero que, sin duda, funciona en Vassla.
De hecho, es al final de la historia cuando descubrimos que, más allá de ser una historia de personajes, de ser la historia de cómo una ladrona conoce a un príncipe por casualidad y sus destinos se juntan, es la historia de Vassla, ni más ni menos. A través de la arena habla de historia y política, una faceta muy propia de las distopías y que, sin duda, ha hecho que me guste mucho el final.
La escritura de Laura está repleta de subordinadas y un léxico no especialmente sencillo (o, al menos, a mí me ha resultado muy elaborado y elegante), pero eso no evita que el ritmo sea ágil y se lea rápido.
Por último, recomiendo esta historia especialmente a quienes no estén muy acostumbrados a leer fantasía. Aunque se trate de un mundo nuevo con un pasado ajeno al nuestro, al fin y al cabo, los personajes son quienes llevan la acción y están llenos de vida. Y, si eres un ávido lector de fantasía, es un buen momento para descubrir que no siempre necesitamos magia para crearla.
Gracias a Insomnia Ediciones por el envío del ejemplar.