Viajar a Japón te rompe la tarde

Supe de la existencia de este libro porque soy seguidora de Frikidoctor y ya sabía desde hace años que él es quien preparaba la sección de Japón del programa El Hormiguero. No suelo ver mucho este programa pero conocía la sección y Frikidoctor subió un par de vídeos cuando viajó con el Monaguillo y me parecía muy curioso.

Al Monaguillo lo conocía por verlo en diversos programas y monólogos, sobre todo me reí mucho con él en su paso por Me resbala. Viajar a Japón en busca de objetos con funciones extrañas debe de ser divertido y toda una aventura, así que este libro me inspiraba ante todo, curiosidad.

No sabía bien qué formato tendría o cómo estaría narrado. Creía que sería algo así como Japón con Jamón, del canal Nekojitablog, pero ha sido algo diferente.

Es una lectura muy, muy ligera, en un par de tardes te lo lees tranquilamente. El estilo es similar al de un monologo, solo que en lugar de verlo interpretado lo lees y, en los diferentes capítulos, el Monaguillo cuenta las experiencias que tuvo visitando los diferentes lugares o lo que les sucedió en el aeropuerto o en los restaurantes, etc. Son anécdotas impregnadas de su humor característico, con muchas referencias a la cultura popular española y con chistes, para que negarlos, un poco predecibles.

El Monaguillo es un cómico que me gusta pero creo que este tipo de historias ganan mucho con la interpretación que se le puede dar y al leerlo no me ha hecho tanta gracia, aunque sí creo que tiene su público y que hay gente que se reirá con él. Me parece un libro muy bueno para leer en una sala de espera, en el avión, el hospital, etc porque es muy ligero y sencillo. En ese tipo de situaciones no suele apetecer enfrascarse en una lectura muy compleja y por eso este me parece ideal para esos casos. También creo que es buena opción para personas que no suelen leer, el estilo es directo y consigue mantener la atención del lector.

Las personas a las que les guste este tipo de humor lo disfrutarán pero no vayáis a él esperando conocer algo más de Japón, es un poco básico con respecto a eso. Si no sabéis nada de nada del país sí que aprenderéis, pero este no es un libro para conocer Tokio o todas las costumbres japonesas, su intención es otra, la de crear humor basándose en las anécdotas de este viaje que realizaron los autores.
La edición del libro aporta más dinamismo a la lectura, con capítulos cortos, citas, dibujos y diferentes fuentes. La portada también me parece muy chula.

Esta no ha sido una lectura ideal para mí, pero ha sido curioso, es el primer libro de este estilo que leo y me llevo una experiencia más.

Un libro muy ligero que se lee en nada, similar a un monólogo escrito en el que el Monaguillo cuenta las anécdotas que vivió en su viaje a Japón con su particular estilo.