Aunque lo había leído mucho tiempo atrás en formato digital, le debía una revisión a este ya clásico en el mundo del cómic, y no me ha decepcionado nada. El 300 de Miller es una JOYA del noveno arte. Soberbio y épico en cuanto a narrativa, maravilloso en diseños de personajes, uso de las viñetas, composiciones, fondos, incluso colores. Frank Miller en su momento álgido tocado por la varita de los dioses. Es inevitable leerlo y rememorar la también soberbia película de Zack Snyder, pero es que Snyder no se complicó mucho la vida y usó el cómic casi como un storyboard, tomando fotogramas idénticos y frases literales, y con la única pega de que la película le da un toque mucho más irreal y fantástico que el cómic. Hay que visitar este 300 de Miller cada cierto tiempo porque es una lección de narrativa, dibujazo y buen hacer, y un buen momento para acercarse, aunque sea en un tomo muy personal, a las guerras antiguas y en particular a la batalla de las Termópilas. Dada la corta vida del género (novela gráfica), para mí es un clásico ya que se reeditará sin cesar. |