Me ha gustado esta novela. Creo que tiene una construcción compleja y que la autora ha sabido manejarla estupendamente. Jen, la protagonista de la novela es testigo, una noche, del asesinato de un hombre a manos de su hijo Todd. Obviamente no da crédito y tras dejarlo en el calabozo ella y su marido vuelven a casa pensando en qué pasos seguir al día siguiente, pero al día siguiente esos hechos no han ocurrido. Pensé que iba a repetirse el mismo día constantemente, cual famoso día de la marmota, pero no, es un viaje hacia atrás continuo, pero no sabéis hasta qué punto porque cuanto más retrocede en el tiempo, más difícil y complicado es mantener la historia y sin embargo a la vez es sencillo para el lector seguir el hilo. Sinceramente, pensé que no iba a engancharme, pero ha sido todo lo contrario, me ha gustado y entretenido mucho esta historia donde una madre lucha por intentar impedir el terrible acto que llevará a cabo su hijo, mientras lucha por encontrar la raíz del problema y a la vez va descubriendo cosas de su familia que desconocía. |